Según la Agencia France-Presse, de los aproximadamente 3,8 mil presos que se encontraban en la prisión antes del ataque, alrededor de un centenar permanecen en prisión en la actualidad. Hombres armados atacaron la prisión nacional de Puerto Príncipe, la capital haitiana, donde se estaban produciendo disturbios, y liberaron a un número indeterminado de prisioneros. Diez personas murieron en una fuga masiva de prisioneros de la prisión más grande de Haití.
Haití vive una crisis sociopolítica que dura décadas y que se ha agravado desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021. Desde entonces, la inacción de las autoridades ha provocado un aumento sin precedentes de la influencia de los grupos mafiosos que se dedican a la extorsión, el secuestro para pedir rescate y controlan zonas enteras del país, incluidas las terminales de combustible.
Grupos de gánsteres paralizaron la vida en la capital de Haití, Puerto Príncipe, y su líder anunció su intención de “liberar” el país, informa Associated Press. Los tiroteos en el centro de la ciudad y cerca del aeropuerto internacional comenzaron el 29 de febrero, durante la ausencia del primer ministro Ariel Henry, que se encuentra en Kenia tratando de ultimar los detalles del despliegue de fuerzas armadas extranjeras en Haití para luchar contra las pandillas.
El informe de la agencia mostró vehículos blindados patrullando calles vacías en el centro de Puerto Príncipe y haciendo guardia cerca de barrios marginales controlados por pandillas. No está claro si Cherizier cuenta con el apoyo de otras bandas importantes, que se estima controlan hasta el 80% de Puerto Príncipe. Las aerolíneas cancelaron el jueves todos los vuelos nacionales e internacionales desde Puerto Príncipe, cuyo aeropuerto fue atacado, informó el periódico local Nouvelliste. Unos bandidos atacaron la comisaría de policía de la zona de Bon-Repo y le prendieron fuego. Como resultado del ataque, al menos cuatro agentes del orden murieron.