La Nube de Oort está formada por cometas con órbitas de millones de años y rodea el Sistema Solar
La capa esférica, conocida como Nube de Oort, es prácticamente invisible. Las partículas que lo componen están distribuidas tan finamente y tan lejos de la luz de cualquier estrella, incluido el Sol, que los astrónomos simplemente no pueden ver la nube, aunque nos envuelve como una manta. Puede resultar difícil de comprender para la mente humana: la nube cósmica es tan colosal que rodea el Sol y ocho planetas, extendiéndose billones de kilómetros en el espacio profundo.